El presidente del PP asegura que con este anuncio Sánchez quiere “enfangar” la política española antes de las elecciones catalanas y europeas, pronostica que Sánchez no presentará el lunes su dimisión, “dirá que dadas las muestras de cariño recibidas seguirá al frente para parar a la derecha” y asegura que “no tiene palabra”.
Explica que “no hay precedentes” de que un presidente mande una carta “calumniando y difamando”, suspendiendo su agenda y responsabilizando a la oposición y medios de comunicación de que los jueces actúen.
Afirma que “el presidente, su partido, el gobierno y su entorno tienen un problema judicial y no político desde antes de las elecciones generales”. “Si quiere proteger a su familia que dé explicaciones en el Congreso y no publique una carta diciendo que esto es una confabulación”, subraya.
“Sánchez quiere equipararme a su forma de hacer política, pero somos muy diferentes. Yo no tengo problemas con la Justicia. Quién tiene un problema judicial es el presidente y su Gobierno. El deber de Sánchez es dar explicaciones”, sentencia.
Asegura que él jamás hará en política exterior y en materia de Defensa lo que ha hecho Pedro Sánchez en estos cinco años y critica los cambios de postura en las posiciones históricas en el Sahara Occidental o con Argelia. “Ha roto todos los puentes y toda la cortesía parlamentaria. Antes la política exterior se consensuaba. Ahora no tenemos ninguna información”, reflexiona.