El Consejo de Ministros ha acordado remitir a las Cortes el proyecto de Ley de Industria y Autonomía Estratégica, que ordenará el sector y la política industrial y fijará los criterios de colaboración entre las administraciones públicas.
El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, ha destacado que «la reindustrialización en Europa es una necesidad y es una enorme oportunidad para España». El índice de producción industrial en España se está incrementando más de un 6% y el gran indicador europeo, el PMI manufacturero, crece muy por encima de la media europea gracias, ha argumentado el ministro, a que la política industrial activa vuelve a ocupar un espacio en la agenda pública.
La futura norma sustituirá a la ley actual de 1992, que ha quedado desfasada, e incorpora conceptos como «descarbonización, digitalización, autonomía estratégica, innovación, talento, brecha de género, resiliencia, transición verde y simplificación administrativa», ha remarcado Hereu.
El titular de Industria ha precisado que la futura ley busca «la reindustrialización para generar oportunidades de equidad social y territorial, garantizar nuestra autonomía estratégica, la atracción de inversiones industriales en España, el impulso de la innovación, la competitividad, la transición verde, la descarbonización de la industria y su transición digital». Otro de sus objetivos es el mantenimiento de las capacidades industriales, evitando y proponiendo alternativas en los procesos de deslocalización.
Instrumentos de política y gobernanza industrial
Jordi Hereu ha subrayado que el texto no se limita a poner al día la norma actual, sino que supone un antes y un después en la industria española. El proceso de transformación y reindustrialización se realizará con instrumentos de política y gobernanza industrial.
El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, durante la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros. | Pool Moncloa / Jose Manuel Álvarez
Como instrumentos de gobernanza, el ministro ha señalado la Estrategia Española de Industria y Autonomía Estratégica, que es el documento que sentará las líneas generales de política industrial y que se concretará en un plan estatal con vigencia de tres años y en estrategias con un horizonte de seis años. Además, se crea el Consejo Estatal de Política Industrial (CEPI), un nuevo órgano consultivo, que coordinará esta política que el Gobierno está abordando desde distintos ministerios. A este órgano se suma la Conferencia Sectorial de Industria y PYME, para favorecer la cooperación entre el Estado y las comunidades autónomas, y el Foro de Alto Nivel de la Industria Española, que permitirá la interrelación entre el Gobierno y los sectores industriales.
Como instrumentos de atracción de inversiones, Jordi Hereu se ha referido a los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) que, más allá de la vigencia de los fondos ‘Next Generation’, estarán dirigidos a los ecosistemas industriales.
Proteger la actividad industrial existente
Junto a la atracción de nuevos proyectos industriales, la nueva ley pretende mantener y proteger la actividad que ya existe en España. Con esta finalidad, regula que cualquier empresa que quiera finalizar su actividad industrial en nuestro país tendrá que anunciarlo con nueve meses de antelación al Gobierno, que analizará, junto a la empresa, los sindicatos y las comunidades autónomas, «las distintas alternativas para revertir la decisión o, en su caso, asegurar todas las opciones para el mantenimiento de las capacidades industriales», según ha explicado el ministro.
Hereu ha añadido que la norma contempla que aquellas empresas que hayan recibido subvenciones públicas superiores a tres millones de euros en los últimos cinco años tengan que mantener su actividad y el empleo durante el periodo que establece la ley.
Autonomía estratégica
La norma también recoge nuevos instrumentos para asegurar la capacidad de producción propia en productos y bienes de primera necesidad y, por tanto, críticos y estratégicos, en especial en situaciones de crisis como fue la pandemia. Por ello, crea la Reserva Estratégica de las Capacidades Nacionales de Producción Industrial, susceptible de movilizarse con rapidez ante una situación de crisis.
El ministro ha aclarado que se trata de un mecanismo que definirá un catálogo de productos y capacidades industriales e identificará a aquellas empresas que puedan producirlos, establecerá acuerdos con ellas, de manera que, ante una situación de crisis, puedan movilizar sus capacidades de producción para satisfacer necesidades básicas.