David Toribio, gerente de Mi Frutería, ha expresado en El Intercafé las dificultades que enfrenta su negocio para reabrir su tienda en Paiporta, tras los daños sufridos en la zona debido a las obras en la localidad. En declaraciones recientes, Toribio detalló que la reapertura de su establecimiento implica una inversión superior a los 140.000 euros, lo que supone un reto considerable para la pequeña empresa.
«La reabrir nuestra tienda en Paiporta nos supone más de 140.000 euros», afirmó Toribio, quien resaltó la complejidad del proceso. A pesar de que el negocio sigue funcionando en su otra ubicación en Alfafar, los ingresos son significativamente más bajos, lo que agrava aún más la situación. «Los ingresos son la mitad, pero el problema es que no nos podemos poner fecha para abrir en Paiporta porque no depende de nosotros, sino de la situación del local propio», explicó el gerente.
El empresario también subrayó los problemas estructurales del local en Paiporta, mencionando que aún persiste la humedad, un inconveniente que se ha repetido de forma constante. «Nos sigue supurando la humedad de forma reiterada», indicó Toribio, quien también denunció el estado general de la zona. «Tenemos la tienda en una zona cero, porque hasta prácticamente 3 semanas atrás hemos tenido camiones cuba en la puerta, sigue estando todo alrededor destrozado y lamentablemente, muchos no van a abrir», lamentó.
El empresario comentó que, históricamente, los pequeños empresarios han invertido los recursos disponibles en mejorar sus negocios, pero en este caso, los elevados costes de la reapertura y las dificultades logísticas complican la situación. «Lo que supone reabrir en Paiporta, arreglo a lo que teníamos, nos supone más de 140.000 euros, lo que lo hace muy difícil», reiteró.
A pesar de los obstáculos, Toribio y su equipo han decidido seguir adelante con la reapertura en Paiporta, ya que consideran que el local en el que operaban es adecuado y desean regresar a la zona una vez se recupere. «Hemos decidido volver a abrir, porque el local que tenemos nos gusta mucho aunque la zona deba volver a resurgir», destacó.
No obstante, también se han encontrado con dificultades burocráticas en su intento de reabrir temporalmente en el mercado local para continuar ofreciendo servicio. «Nosotros solicitamos poder reabrir en el mercado en una parada para poder dar servicio hasta que tengamos nuestro local abierto», explicó Toribio. Sin embargo, la respuesta fue negativa tras una larga espera, y la última contestación fue que la parada había sido asignada a otra persona que lo había solicitado en 2023. «Con la burocracia existente, nos han obligado a presentar una instancia, con los motivos y demás, y que no contestaban, y la última respuesta ha sido que le han dado la parada a una persona que lo solicitó en 2023», comentó con frustración.
Las dificultades que enfrenta Mi Frutería reflejan los retos que muchos pequeños empresarios están viviendo debido a los efectos de las obras públicas y la burocracia, lo que complica la recuperación de las zonas afectadas. Toribio y su equipo siguen luchando por superar estos obstáculos, con la esperanza de que la situación mejore y puedan regresar a su local original en Paiporta en el futuro.
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