La abogada y coordinadora de Ciudadanos en la Comunidad Valenciana, Mamen Peris, ha realizado duras declaraciones sobre la situación política en la región. En una entrevista reciente en El Intercafé, Peris recalcó que su partido está en la causa de la dana para buscar justicia, no para buscar venganzas». Además, definió al presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, de “cadáver político”. Según la líder de Ciudadanos, Mazón «tiene que hacer cosas para borrar todo el peso que lleva», agregando que la atención de la ciudadanía está centrada en la «reconstrucción de la dana«, a lo que sumó que, debido a la falta de acción, los presupuestos no se aprobarán hasta junio, lo que implica una pérdida de seis meses para la Comunidad Valenciana.
Además, Peris criticó la falta de propuestas por parte de la oposición. Señaló que, en un contexto de crisis, «ni Morant ni Baldoví han aportado soluciones con credibilidad», y acusó a la oposición de carecer de una «altura de miras» necesaria para hacer frente a la situación. A su juicio, la política valenciana está estancada, con un presidente que «hasta que lo diga Génova» continúa en el cargo, mientras que la oposición parece no tener un proyecto claro.
Respecto a la situación interna de los partidos de la oposición, Peris expresó su malestar al señalar que, aunque se pueda apartar a Mazón, la gran pregunta es «dónde está el programa de la oposición» y el «interés general de los partidos». En este sentido, criticó la falta de propuestas serias y coherentes que, según ella, se han centrado más en «reclamaciones» que en presentar soluciones efectivas para la ciudadanía.
Peris también se refirió al caso de la dans que afectó gravemente a la Comunidad Valenciana, explicando que Ciudadanos se personó como acusación popular en el caso no por “venganza” sino por el derecho constitucional que tienen los partidos a hacerlo. La coordinadora de Ciudadanos subrayó que, aunque su formación no tiene representación en el parlamento valenciano, su implicación en este caso se justifica por el deseo de conocer «toda la verdad» sobre lo sucedido, dado que, según ella, existe una “carga emocional muy grande” y es esencial evitar que un desastre similar vuelva a ocurrir. Aclaró que no hay motivaciones personales ni de venganza, a pesar de los intentos de ciertos medios de vincular la acusación con una cuestión política.
