Sorolla, Nueva York y Valencia. Tres nombres propios han sonado con fuerza este primero de mayo. Las palabras del presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, medio saliendo de un corro de periodistas el pasado miércoles en Feria Valencia despidiéndose del Congreso del PP europeo no fueron gratuitas. Vino a decir que de marchaba a Nueva York para traer buenas noticias a la Comunitat Valenciana. Y hacía falta, para su Ejecutivo y para todos, porque si bien su figura parece amortizada tras la gestión de la dana del pasado octubre, no es menos cierto que, a trompicones, intenta marcar una agenda de gestión, estabilidad y prosperidad. Mazón, ha anunciado que el Ejecutivo valenciano “está trabajando con la Hispanic Society of America “en un proyecto conjunto para que la gran obra internacional de Sorolla venga a casa”. Y también trabaja con una compañía aérea para establecer una ruta directa con Estados Unidos.
El jefe del Consell se ha reunido con el CEO de la Hispanic Society of America, Guillaume Kientz, en una primera toma de contacto en la que también han visitado los fondos de este organismo. En el encuentro también han participado Pilar Tébar, secretaria autonómica de Cultura, y Gemma Contreras, directora del Instituto Valenciano de Conservación, Restauración e Investigación.
El president ha señalado que “llevamos mucho tiempo trabajando con discreción, pero de forma eficaz y eficiente, en un acuerdo ambicioso y amplio que cada vez está más cerca”. Mazón ha señalado que “esta visita es un paso más para que la seña de identidad que representa Sorolla la puedan disfrutar como merecen todos los ciudadanos de la Comunitat Valenciana”.
En esta línea, ha afirmado que “en las próximas semanas vamos a avanzar en esta negociación para llevar a buen puerto este acuerdo” y ha destacado que “la voluntad de ambas partes es muy positiva para que la obra de Sorolla pueda estar en su casa natal”.
Colaboración
El president ha puesto en valor “la estrecha colaboración durante muchos años” entre la Generalitat y la Hispanic Society of America “en la difusión de nuestro pintor más internacional” y ha puesto como ejemplo la restauración, a través del Instituto Valenciano de Conservación, Restauración e Investigación (IVCR+i), de 32 bocetos entre 2013-2015 de la serie pictórica ‘Visión de España’ que obtuvo el premio Europa Nostra de la Unión Europea
Así, ha aseverado que ambas instituciones “tenemos la visión de que este legado compartido refuerza, no solo el papel central del ‘maestro de la luz’ en el panorama cultural mundial, sino la importancia de València como epicentro de su identidad artística”.
De este modo, ha agradecido a la Hispanic Society of America “el cuidado, el realce y la promoción de la cultura española y la valenciana en particular” y ha recordado que “la primera exposición que hizo Sorolla en Estados Unidos fue la que inauguró está emblemática institución hace 116 años”.
La Hispanic Society of America es un museo y biblioteca de investigación para el estudio de las artes y cultura de España, Portugal, Iberoamérica y Filipinas. Fundada en 1904 por Archer M. Huntington, alberga una gran colección de arte, literatura y objetos históricos en la que destaca principalmente la serie «Visión de España» de Joaquín Sorolla.
¿Palacio de las Comunicaciones?
Una nueva esperanza se cierne sobre el futuro del Palacio de las Comunicaciones de Valencia, el emblemático edificio de Correos adquirido por el Consell del Botànic hace cuatro años con la intención de convertirlo en un espacio cultural. Tras el anuncio de Mazón, fuentes cercanas a las negociaciones apuntan a que este inmueble podría ser el enclave elegido para albergar la tan esperada exposición permanente de la obra del maestro Sorolla.
Aunque la designación definitiva del Palacio de las Comunicaciones como pinacoteca Sorolla aún no es oficial, las condiciones del edificio lo convierten en un firme candidato, según ha publicado este jueves Levante-EMV. Propiedad de la Generalitat y declarado Bien de Relevancia Local, este destacado ejemplo de arquitectura ecléctica con toques modernistas cuenta con más de 9.400 metros cuadrados. Además, su inauguración fue contemporánea a la vida de Sorolla, lo que añade un vínculo histórico significativo a la posibilidad de que su obra se exhiba entre sus muros.
Curiosamente, el propio Palacio de las Comunicaciones ya albergó en 2023 una exposición que también rendía homenaje al arte valenciano, incluyendo obras del propio Sorolla. Bajo el título «De la foscor a la llum: cinc segles d’art», la muestra inaugural del Año Sorolla presentó 73 obras de la colección Lladró, adquirida por la Generalitat y dispuesta para su visita en este mismo edificio. Entre las piezas de José de Ribera, Zurbarán, Benlliure y Pinazo, destacaba la obra de Sorolla, ‘Yo soy el pan de la vida’, una pintura de grandes dimensiones que presidió el hall del palacio. Este precedente de uso cultural centrado en el arte valenciano refuerza la idoneidad del Palacio de las Comunicaciones para convertirse en la futura pinacoteca dedicada a Joaquín Sorolla.