La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, ha anunciado que el Ayuntamiento de València se une a los regantes en un frente común para pedir al Gobierno de España que la Confederación Hidrográfica del Xúquer (CHJ) no repercuta los trabajos de reparación del Canal Xúquer-Túria y del Canal principal del Camp de Túria, afectados por la dana, entre todos los vecinos y regantes. De hecho, como ha revelado “ya hemos exigido por escrito a la Confederación Hidrográfica del Xúquer que en ningún caso se nos obligue a asumir la factura de cerca de 30 millones en el Canal del Xúquer-Túria y de 15 en el de Camp de Túria de unos gastos de reparación que son consecuencia de un hecho extraordinario como fue la dana. El gobierno debe estar a la altura porque no vamos a consentir esta injusticia, pedimos sensibilidad y altura de miras”.
En este sentido la alcaldesa ha explicado que el Ayuntamiento de València tuvo conocimiento de este hecho a través de la Comunidad general de usuarios del Canal Xúquer-Turia y ha manifestado que debe ser el Gobierno quien asuma “las obras que sean necesarias para que esta infraestructura, que es vital para los agricultores y vital para que València y su área metropolitana tengan agua potable, funcione correctamente, y no pasarnos la factura ni a agricultores ni a usuarios”.
En el caso del Canal Xúquer-Turia estos gastos se repercutirían mayoritariamente a los abonados de la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (EMSHI), “que son vecinos y vecinas de Valencia y del área metropolitana de Valencia, especialmente afectados por la dana. Por tanto, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Xúquer y el gobierno de España tienen que trabajar urgentemente por encontrar la vía de incorporar estos importes directamente a los fondos de recuperación. Me reuní con el vicepresidente de la Comisión y el Gobierno de España tiene margen económico para poder incorporar todos estos conceptos a esos fondos europeos”, ha indicado.
“Les pido que trabajen al presidente de la Confederación Hidrográfica del Xúquer y al Gobierno de España, que se ponga a trabajar en esto que es lo urgente, que se dejen de politiqueos y empiecen a trabajar en lo que realmente importa”, ha añadido la alcaldesa. “No se puede repercutir a los vecinos de València y el área metropolitana, a los regantes y a los agricultores de ambos canales 45 millones de euros de unas obras de reparación por un hecho tan excepcional como es la dana”, ha reivindicado María José Catalá.
II Congreso Internacional del Tribunal de les Aigües
Catalá ha realizado estas declaraciones en II Congreso Internacional del Tribunal de les Aigües celebrado en el Palau de l’Exposició, que quedó aplazado el pasado mes de noviembre tras sufrir València y su área metropolitana la dana. La alcaldesa les ha agradecido “a todos los agricultores y regantes que, en aquellos días duros, con sus propios tractores y sus propias manos, fueron parte importante de ese ejército de héroes silenciosos que rescató a vecinos, abrió caminos y colaboró con los servicios de emergencia”.
Durante su intervención ha recordado que el agua “no es sólo un recurso, es identidad, es tierra, es alimento, es paisaje, es compromiso y si alguien lo sabe bien son agricultores y comunidades de regantes. A ellos quiero dar las gracias, también por su generosidad. Por su conocimiento. Por cuidar cada gota como si fuera oro y hacer que cada una de ellas tenga un sentido”.
En este sentido la alcaldesa ha puesto en valor el apoyo del Tribunal de les Aigües al pacto histórico para recuperar L’Albufera, que “también sufrió el golpe de la dana, pero el humedal y sus cultivos también protegieron muchas poblaciones y núcleos urbanos de los efectos de la inundación, y su recuperación también debe ser un símbolo de la reconstrucción”.
Asimismo, la alcaldesa ha recordado que “la enseñanza que nos deja esta tragedia, como ocurrió tras la riada del 57, es que debemos protegernos mejor y estar más preparados. Necesitamos un nuevo Plan Sur, necesitamos infraestructuras que protejan a nuestros vecinos y que garanticen los suministros básicos como el agua, que en aquellos días se vio gravemente comprometida”.
Por último, ha apuntado que en momentos de incertidumbre, “debemos de ir todos unidos y seguir la estela y los valores que impregnan el Tribunal de les Aigües: diálogo, trabajo, honestidad y solidaridad. Hoy estamos ante un tribunal que es una seña de identidad de los valencianos, donde la palabra es sinónimo de respeto y compromiso. Y eso es lo que los valencianos nos merecemos. Respeto y compromiso”.