La Federación de Comunidades de Regantes de la Comunidad Valenciana (Fecoreva) ha presentado su hoja de ruta con la asunción de la nueva presidencia por parte de José Alfonso Soria, quien sucede a Pascual Broch. En sus primeras declaraciones, Soria ha garantizado el suministro de agua para regadío en la región durante este año y parte del próximo, pese a los estragos de la reciente dana, gracias a las reservas de los sistemas del Júcar, Turia, Palancia y Mijares. Sin embargo, ha lanzado un claro mensaje sobre la necesidad de una planificación hídrica a largo plazo y la despolitización del agua.
Soria, que ha asumido recientemente la presidencia de Fecoreva, destacó en el programa Intercafé la «labor y el legado» de su predecesor, Pascual Broch, al tiempo que esbozaba los desafíos y propuestas de la federación bajo su nuevo mandato. La prioridad, según Soria, es «prevenir y solicitar las obras necesarias para tener agua suficiente y de calidad para poder regar», subrayando la urgencia de construir «algún embalse más».
Fecoreva aboga por una estrategia hídrica integral que combine la infraestructura con la eficiencia. José Alfonso Soria ha señalado como «aceptable» la recuperación de aguas residuales, impulsando el concepto de «vertido cero», y la desalación como opción, siempre que no exista una alternativa mejor. El nuevo presidente también ha enfatizado la importancia de una «mejora y modernización del regadío», con la introducción de nuevas tecnologías. Aunque la Comunitat Valenciana ya figura entre las regiones «más modernizadas y tecnológicas de toda España» en este ámbito, Soria ha indicado que las modernizaciones realizadas hace 10 o 15 años «necesitan una remodernización»
El presidente de Fecoreva ha sido contundente al abordar la injerencia política en la gestión del agua. «Cuando la política intenta controlar el suministro del agua no se ponen de acuerdo y llegan las guerras del agua», afirmó Soria, reivindicando que «el agua debemos exigir que llegue a todos. Los políticos no deben decidir dónde va el agua. Cuando uno dice blanco otro dice negro y nos arrastran a todos».
En este contexto, Soria ha advertido sobre las graves consecuencias que acarrearía la interrupción del Trasvase Tajo-Segura. Si este no suministra el agua necesaria, «habrá problemas en la ‘despensa de Europa’», en referencia a la vital producción agrícola de la región que abastece a gran parte del continente.
La Albufera
La situación de la Albufera de Valencia, un ecosistema milenario, ha sido otro de los puntos centrales de la intervención de Soria. El presidente de Fecoreva ha descrito un escenario preocupante: «ahora hay menos cantidad de agua, la profundidad es menor, [las algas] proliferan». Ha explicado que, ante la necesidad de desembalsar agua, «hay que cerrar playas», y ha apuntado que «ahora se hacen más análisis que hace 10 o 15 años», sin que ello haya resuelto el problema de las aguas turbias que afectan a los bañistas cuando la temperatura y densidad del agua de la Albufera es diferente a la del mar.
José Alfonso Soria ha defendido la necesidad de «abrir las compuertas de la Albufera para respetar el nivel» y ha reivindicado el «dragado de manera tradicional» para el lago, con más de 1.000 años de antigüedad. El presidente ha puesto en valor el papel de los arrozales como «filtros verdes», asegurando que el agua que proviene de ellos «es de calidad» y «no está contaminada como se puede pensar». En esta línea, ha reclamado «poner todo encima de la mesa para solucionar el problema de la contaminación del agua de la Albufera» y «revisar las zonas de los municipios que vierten» al lago.
Para abordar parte de esta problemática, Soria ha anunciado la firma de un convenio con la Generalitat Valenciana. Se pretende reutilizar al máximo las aguas de Pinedo que ahora no se están depurando y que los regantes del Turia y Júcar puedan aportar agua suficiente a la Albufera para los diferentes «lavados» que necesita el lago. «Nosotros garantizaremos que el agua del Turia llegue a la Albufera a cambio de esa otra agua», señaló Soria.
Imagen: Broch, el conseller de Agricultura, Miguel Barrachina, y Soria, el pasado 2 de julio en Orihuela.



