Juan Julián Verges has logrado eliminar «la acera de la muerte» tras más de 30 años, que cosas

Las obras emprendidas en la calle San Vicente Mártir de Valencia por el Ayuntamiento de Valencia en el tramo conocido como «acera de la muerte» tiene nombre y apellidos: el del dirigente vecinal Juan Julián Verges.

Él ha sido quien día tras día, mes tras mes y año tras año ha ido tocando a la puerta de los distintos concejales de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia, nombres como los de los concejales del PP y el PSPV Miguel Domínguez, Jorge Bellver, Vicent Sarría, Sandra Gómez y Juan Giner, como ven de distintos colores políticos, para erradicar un punto negro de la antigua Vía Augusta y salida de la ciudad hacia sur también llamada carretera Real de Madrid.

No sólo tocaba la puerta Vergés a los políticos. A nosotros, los escribas, y uno de ellos a quien escribe, siempre acudía puntual a su cita entregándonos el ejemplar anual de la Asociación Parque Central-Amparo Iturbi y en esas páginas, de papel nada de web ni de digital, entre las reivindicaciones estaba la eliminación de la «acera de la muerte». Hoy Juan Julián es tu día porque una de las más antiguas demandas vecinales se ven por fin satisfechas.

Le ha tocado al edil de Urbanismo del equipo de María José Catalá, Juan Giner, liderar con su voz el inicio de la demolición de las viviendas que estrechaban el paso de los peatones. Como recordaba el edil Giner «se ejecuta con motivo del desarrollo del Programa de Actuación Integrada (PAI) de Moncayo, en el distrito de Jesús, que constituye una verdadera actuación de regeneración urbana. Con el derribo de las viviendas, se ampliará esa acera y mejorará la movilidad peatonal, la seguridad vial del vecindario comienza a ser una realidad

La Acera de la muerte dará paso a 200 nuevas viviendas. Habrá unifamiliares con patio interior, y en bloques de tres plantas y edificios de hasta nueve alturas más ático.

Quedan fuera de esta actuación urbanística un edificio sito en el número 12 de la calle Pianista Empar Iturbi, otro inmueble protegido de la calle del Moncayo, además del grupo de viviendas tradicionales de dos alturas con patio trasero recayentes al tramo de la calle del Moncayo comprendido entre los números 3 y 15.

Todo ello con el fin de preservar las partes históricas.

Dicho lo dicho me queda por escribir que el movimiento vecinal es necesario y su voz sigue siendo una de las más autorizadas de esta ciudad. Mis saludos Juan Julián Vergés. A tí y a todos aquellos luchadores por mejorar la acera, la plaza, la calle o tener mejores equipamientos. Por el movimiento vecinal. Saludos a Juan Antonio Caballero, Félix Estrela, Antonio Cañuelo, Carmen Vila, María José Broseta y aquellos que les precedieron. Son las caras de muchos otros quienes sin vuestra lucha Valencia no sería lo que es.

Hoy me gustaría que alguna de las 45 entidades participantes mañana en el Debate sobre el Estado de la Ciudad recordara a Juan Julián Verges