El empresario y conferenciante Sergio Ayala participará en el evento Retail Future con una ponencia en la que combina humor, motivación y herramientas prácticas para afrontar los retos del pequeño comercio en la actualidad.
“Al final el pequeño comercio está sufriendo muchísimo y detrás de cada negocio hay una realidad que afrontan todas las personas. Ahora bien, se necesitan varios inputs clave para llegar a tu objetivo como es la diferenciación, resiliencia y valentía”, explicó Ayala, quien defendió que el futuro del comercio pasa por encontrar un estilo propio y mantener la capacidad de adaptarse.
Con su estilo particular, que mezcla mensaje y humor, Ayala aseguró que esta fórmula permite transmitir claves útiles de manera cercana: “La mezcla de humor y mensaje permite mezclar ese sentido de la felicidad con una caja de herramientas que van a poder aplicar en su día a día”.
Frente a quienes desconfían del mundo de las conferencias, el ponente defendió su autenticidad y experiencia empresarial: “La gente que da conferencias, muchas veces está vista como un vende humos, pero como nosotros tenemos nuestra propia empresa, nos dedicamos a dar indicadores que velen por la compañía global y por la felicidad de los trabajadores”.
Ayala incidió en que la conciliación familiar y un salario digno deben ser pilares de cualquier compañía: “Yo hablo de amor y humor, pero teniendo las premisas de que los trabajadores tengan una buena conciliación familiar y al mismo tiempo, un muy buen sueldo. La felicidad de nuestros trabajadores creará un clima propicio para seguir avanzando”.
En esa línea, criticó la cultura empresarial que sacrifica la calidad de vida por el beneficio económico: “Cuando tú quieres ganar mucho dinero, por encima de vivir bien o tener una vida digna, tus trabajadores lo notan porque trabajan muchísimas horas, no tienen vida familiar y la cabeza no desconecta”.
Finalmente, recordó sus inicios hace 20 años en la empresa, en la que apostó por una jerarquía horizontal. “Sobre este acontecimiento, desde la Cámara de Castellón me llamaron para dar una charla y le puse un componente de humor, con lo que estuve a gusto y pude desarrollar este camino”, concluyó.
