La comisión de investigación sobre la dana en Les Corts Valencianes, apenas 48 horas después de la dimisión de Carlos Mazón, se ha convertido en el nuevo campo de batalla institucional entre el Ejecutivo autonómico y el Gobierno central. El presidente de la Generalitat en funciones ha solicitado formalmente comparecer el próximo martes 11 de noviembre, un movimiento estratégico que coincide con la fecha clave en la que la comisión, presidida por Vox, había citado a la cúpula del Ejecutivo de Pedro Sánchez. No confundir esta comisión con la que se está celebrando en el Congreso de los Diputados por es mismo motivo.
Mazón dirigió su escrito a la Mesa del órgano parlamentario para «dar cuenta de las actuaciones llevadas a cabo por la Generalitat» en la recuperación social y económica de las zonas afectadas. Con esta petición, Mazón, que antes de su cese ya había manifestado su intención de comparecer sin concretar fecha, intenta tomar el control del debate parlamentario sobre la tragedia.
El pulso entre València y Madrid estalló al conocerse la lista de comparecientes prevista para el martes 11 en Les Corts, que incluía al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y a cinco altos cargos estatales: los ministros María Jesús Montero (Hacienda), Margarita Robles (Defensa) y Fernando Grande-Marlaska (Interior), además de la exministra Teresa Ribera y la delegada del Gobierno en la Comunitat, Pilar Bernabé.
Sin embargo, Moncloa ha desactivado la ofensiva valenciana. La portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, ya había descartado la asistencia de Sánchez y los ministros, amparándose en que «no tienen obligación de hacerlo al ser representantes estatales». Fuentes de la Presidencia del Gobierno han subrayado que Sánchez rinde cuentas en las Cortes Generales (Congreso o Senado), y que «lo previsible es que no acuda el próximo martes a Valencia». Madrid, a su vez, exige que Mazón cumpla con su propia citación y acuda al Congreso el 17 de noviembre. Bernabé ha reforzado el rechazo, tildando la comisión de Les Corts de «circo» por su agenda y por no haber citado a las víctimas.
Maniobras
La comisión de investigación, creada a finales de noviembre y liderada por Vox, ha sido objeto de fuertes críticas por parte de la oposición (PSPV y Compromís) desde su inicio. El órgano ha celebrado solo dos sesiones (1 de julio y 30 de septiembre) en las que únicamente comparecieron técnicos para buscar una «visión global» antes de los políticos.
La oposición acusa a la Mesa de realizar «maniobras dilatorias» al priorizar a los técnicos e ignorar las peticiones para escuchar a las asociaciones de víctimas, las cuales sí están declarando estos días en el Congreso de los Diputados. La falta de un calendario para las comparecencias de las víctimas, a más de un año de la tragedia, es el principal reproche a la gestión de la comisión.
La comparecencia solicitada por Mazón ahora centra el foco en Les Corts, pero el debate real sobre las responsabilidades —incluida la no comparecencia del Gobierno central— asegura que la controversia política y mediática sobre la dana está lejos de cerrarse.
Comisión de Investigación del Congreso de los Diputados



