La borrasca Emilia ha mantenido su influencia sobre la Península Ibérica, forzando la activación de múltiples avisos de riesgo (niveles amarillo y naranja) en la costa mediterránea durante la jornada del lunes. Los servicios meteorológicos alertan de tormentas y lluvias intensas en Cataluña, la Comunitat Valenciana, Murcia y áreas del litoral andaluz. Finalmente, el impacto sobre la ciudad de Valencia y su área metropolitana ha sido menor de lo previsto.
A las intensas precipitaciones, que podrían acumular hasta 100 litros por metro cuadrado en un periodo de 12 horas en puntos concretos, se suma la perspectiva de un tiempo adverso más prolongado. Los análisis de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) indican que una masa de aire frío podría disociarse de la circulación atmosférica principal, dando origen a una nueva depresión en superficie que extendería la inestabilidad durante varios días.
El inicio del martes estará caracterizado por un cielo muy cubierto y precipitaciones generalmente moderadas. Se espera que estas sean de intensidad considerable y persistentes en el norte de València y Castellón, aunque, de momento, no se han emitido alertas para esta jornada.
La inestabilidad se prolongará hasta el miércoles y jueves Se prevén cielos nublados y lluvias débiles que irán remitiendo hacia el final del día en el interior. No obstante, los pronósticos de la AEMET apuntan a que las precipitaciones podrían ser moderadas y mantenidas en la franja costera del sur de València y el norte de Alicante. De cara al jueves 18, el panorama general es de débiles precipitaciones.
La vigilancia se centra en estas nuevas perturbaciones, que podrían dejar lluvias de carácter general y persistente, especialmente en el centro y norte el martes y en las comarcas centrales durante el resto de la mitad de la semana.
Imagen: Un ciclista, bajo la lluvia en Valencia (Archivo).



