El director general de Aeropuertos, Puertos y Costas de la Generalitat Valenciana, Marc García Manzana, ha criticado duramente la acumulación de posidonia muerta en playas como las de Dénia durante este verano, responsabilizando de su retirada a los ayuntamientos. En una entrevista en Intercafé, Manzana ha defendido la limpieza de los arenales por motivos turísticos y de salud pública, asegurando que «no es verdad que no se puede retirar» la posidonia muerta.
García aseguró no entender la postura del alcalde de Dénia, Vicente Grimalt, (no mencionó su nombre durante toda la entrevista) ante la situación, ya que «sacamos una instrucción» a mitad de verano que permite la retirada de las algas. El director general argumentó que la posidonia muerta, a diferencia de la viva, «impide el acceso a las playas», provoca «olores nauseabundos» y genera problemas como la putrefacción y la proliferación de mosquitos.
Además de la gestión de la posidonia, Manzana ha exigido al Gobierno central la realización de obras de protección y regeneración en las playas valencianas. El director general recordó que, de las 69 actuaciones previstas en las estrategias marinas de 2015, solo se han ejecutado diez. «Eso es intolerable», afirmó.
García también criticó la política de «desantropización» y «naturalización» del Gobierno central, que busca eliminar toda huella humana de las playas. «El medio ambiente hay que cuidarlo, pero hay que enseñarlo al hombre. Si lo conoce lo valora y lo protege», concluyó.
El director también se refirió a la contaminación en algunas playas, atribuyéndola a la monitorización más estricta que se está realizando tras la dana y a las lluvias que arrastran contaminantes a través de las acequias. En este sentido, señaló que el problema se da especialmente en zonas de desembocadura, como Port Saplaya, donde las redes de alcantarillado unitarias rebosan con las lluvias fuertes.
