La Casa Blanca celebró hoy los nuevos datos del Índice de Precios al Consumidor (IPC), afirmando que la inflación de septiembre “rompió las expectativas del mercado una vez más” y se mantuvo estable gracias a la agenda económica del presidente Donald J. Trump. Sin embargo, la Administración lanzó una dura crítica a la oposición a través de un comunicado publicado en la web institucional, advirtiendo que el inminente «cierre demócrata» o shutdown podría detener este progreso y sumir a los mercados en el caos.
La secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, fue categórica al atribuir el buen desempeño económico a la actual Administración, mientras acusaba a los demócratas de usar a las familias como «palanca» para financiar la atención médica de «extranjeros ilegales». Leavitt advirtió que el cierre podría impedir la publicación del informe de inflación de octubre, algo inédito que dejaría a empresas, mercados y a la Reserva Federal «en desorden».
La Administración Trump se apresuró a destacar varios indicadores económicos clave para argumentar que el país avanza hacia una «nueva Edad de Oro» y que la inflación «no está» de vuelta:
- Inflación Estable: La inflación ha promediado solo el 2.5% desde que el presidente Trump asumió el cargo, cifra que contrasta con el promedio del 5% registrado bajo la Administración Biden.
- Salarios Reales al Alza: Los salarios reales del sector privado están proyectados para aumentar en 1.151 dólares (+1,8%), revirtiendo una disminución de casi 3.000 dólares (-4,5%) observada bajo la Administración Biden.
- Caída del Precio de la Gasolina: Los precios del combustible están en camino de una caída anualizada del 7.5%, revirtiendo el aumento anual promedio del 7.7% durante el mandato de Biden. Los precios de la gasolina, de hecho, se han acercado a sus niveles promedio más bajos en más de cuatro años.
Riesgo
La Casa Blanca también destacó que la variación de 12 meses en los costos generales de la vivienda se encuentra en su nivel más bajo en cuatro años, mientras que los precios de productos esenciales como los huevos han caído un 23.7% desde el inicio de la actual Administración.
Pese a las cifras positivas, la principal preocupación de la Casa Blanca reside en el riesgo político. La Administración ha advertido que, debido a la imposibilidad de desplegar encuestadores en el campo durante un cierre, probablemente no habrá una publicación de inflación el próximo mes, privando a los responsables políticos y a los mercados de datos críticos y generando el riesgo de una «calamidad económica».
La postura de la Administración fue refrendada por analistas externos, como Chris Anstey de Bloomberg, quien señaló que estas lecturas de IPC «reforzarán el argumento del gobierno de Trump de que la inflación está bajo control y que los aranceles no están provocando un aumento del coste de la vida».



