La presidenta de CEV Valencia, Eva Blasco, ha destacado el “ritmo de recuperación muy bueno” que ha experimentado la provincia tras los últimos episodios de crisis, aunque ha matizado que el avance “no ha sido uniforme”, sino que “depende de sectores y municipios”. En sus declaraciones, Blasco subrayó que los progresos se deben “a la resiliencia y trabajo duro de las personas, empresas y trabajadores que, pese a todo, trataron de salir hacia delante”, así como a “la solidaridad de las propias empresas o recaudaciones sectoriales”.
La dirigente empresarial reconoció que “se ha hecho mucha recuperación a pleno pulmón” y quiso poner en valor el papel del sector primario, “el primero que trató de ayudar a sus vecinos”, aunque lamentó que “muchas parcelas siguen inservibles”. En el ámbito económico, señaló que “el comercio y la hostelería han podido reactivarse con el consumo”, si bien “muchos negocios no han podido reabrir”.
Blasco alertó de que “en torno al 15% de los damnificados aún no conoce los importes definitivos del consorcio de seguros”, una situación que, según explicó, “impide planificar inversiones o asumir endeudamientos con seguridad”. “Se necesita mucha celeridad”, reclamó.
En cuanto a la reconstrucción de áreas industriales, destacó la actuación coordinada en el parque empresarial de Riba-Roja, “el principal polo industrial de nuestra provincia”, donde “todas las administraciones han trabajado de forma conjunta”. No obstante, advirtió que “otros parques de l’Horta Sud están sin tocar”, evidenciando diferencias territoriales en el ritmo de recuperación.
La presidenta de CEV Valencia recordó también que el equipo técnico de la confederación elaboró un informe que estimaba “en torno a 12.500 millones de inversión necesarios en infraestructuras hídricas, viarias o ferroviarias”. Aunque reconoció que “se han hecho ciertas actuaciones”, insistió en que “todavía queda mucho por hacer” y que “muchas de esas planificaciones siguen en los cajones”.
Blasco pidió “coordinación política además de técnica”, advirtiendo de que “la inestabilidad encamina a movimientos electorales y eso puede retrasar los acuerdos de consenso que tanto necesitamos para avanzar”.
En su análisis, también denunció “la rigidez de los procedimientos administrativos” que, a su juicio, “frenan la puesta en marcha de proyectos urgentes en situaciones extraordinarias”. “Los ayuntamientos necesitan más adaptabilidad”, señaló, al tiempo que recordó que “la burocracia siempre ha sido uno de los mayores obstáculos para los empresarios, y ahora son los propios alcaldes y concejales los que sufren ese encorsetamiento”.
Finalmente, sobre el relevo en la presidencia de la CEV, Blasco afirmó que se trata de “un proyecto de continuidad” que busca “seguir el camino que Salvador Navarro empezó, uniendo a toda la patronal”. En este sentido, reivindicó “una línea ilusionante que quiere seguir luchando por las tres provincias, porque la unión hace la fuerza”.



