El presidente de la Confederación del Taxi de la Comunidad Valenciana, Fernando del Molino, ha recalcado en El Intercafé: “el taxista tiene una vocación pública, los conductores de las VTC solo quieren ganar dinero. Nosotros ponemos nuestros medios para hacer ese trabajo y siempre estamos al pie del cañón con todo lo que pase en nuestra ciudad, pero los otros van a explotar a los conductores porque pueden ganar más de 1.000 euros en una semana”.
En esta línea, del Molino ha expuesto: “estas empresas no son autónomos que se han montado UBER o Cabify, si no que se trata de complejos entramados económicos donde hay muchos actores implicados. Se quieren cargar las normas urbanísticas para atacar su principal problema de la pre contratación y utilizan todo tipo de trucos para que la gente los pare a mano alzada”.
“La diferencia entre taxi y VTC tiene que estar, pero ellos se saltan las normas y luego quieren erradicarlas porque llevan detrás los mejores abogados posibles y la administración no forma en servicio de autocontrol y eso merma la seguridad de los ciudadanos”, ha fundamentado el presidente de la Confederación del Taxi de la Comunidad Valenciana.
Así pues, Fernando del Molino ha expresado el motivo de las protestas del próximo 24 de abril: “cuando te reúnes con directores de transportes y te dicen que no tienen medios para controlarlo es muy frustrante ya que nosotros con los nuestros, estamos detectando muchas cosas que son preocupantes. No solo las VTC de aquí, sino que también vienen conductores de otras comunidades autónomas a operar”.
“Los Uber files que se destaparon por mano de un trabajador decían que el CEO abogaba que eran ilegales porque se han metido en todas las ciudades de EE.UU saltándose las normas de movilidad. En Europa han empezado a comprar voluntades”, ha destacado el presidente de los taxistas valencianos.