La Comunitat Valenciana se encuentra en una encrucijada industrial que podría redefinir su liderazgo en el sector de la automoción en España y Europa. Ante el progresivo enfriamiento del proyecto de Tesla anunciado hace dos años, la región está configurando un nuevo y poderoso triángulo industrial de la movilidad que rodeará el área metropolitana de València, vertebrado por la autovía AP-7, en el tramo bypass, de norte a sur. La gigafactoría PowerCo en Sagunto, la planta histórica de Ford en Almussafes y la posible llegada de un gran fabricante de coches eléctrico chino, con Cheste en el radar y tras la parálisis del ‘casi’ anuncio de la llegada de Tesla en 2023.
Este nuevo mapa de la automoción plantea un escenario de contrastes: la certeza de la inversión alemana y el auge del vehículo eléctrico colisionan con la crisis de transición que atraviesa Ford.
1. El polo Norte
El proyecto de la gigafactoría de baterías del Grupo Volkswagen, a través de su filial PowerCo, se consolida como el ancla del futuro industrial en la comarca del Camp de Morvedre, al norte del área metropolitana.
- Inversión y empleo: El proyecto supone una inversión de más de 3.000 millones de euros y la creación de más de 3.000 empleos directos, con el objetivo de convertir la región en un hub de electromovilidad. La planta tendrá una capacidad de producción de 60 GWh.
- Estado actual: Las obras en Parc Sagunt avanzan «a todo gas», con una inversión licitada que ya supera los 1.500 millones de euros. Se prevé que la instalación del equipamiento comience en 2025 (un anuncio que se hizo en julio de 2024, pero que puede llevar demora) y la apertura de la gigafactoría se inicie en otoño de 2026 con 1.500 trabajadores.
- Impacto regional: Además de la diversificación industrial para Sagunto (tradicionalmente siderúrgica y portuaria), el proyecto incluye un Battery Campus para atraer y retener talento, creando un ecosistema que conecta la formación profesional con el futuro laboral. Iberdrola también está construyendo una planta solar con una inversión de 112 millones. La superficie equivale a 500 campos de fútbol y contará con 318.000 paneles solares.
2. El desafío del Sur
En el extremo sur, la histórica planta de Ford Almussafes atraviesa una fase de profunda incertidumbre y contracción productiva, mientras se prepara para su transición energética.
- Crisis productiva y empleo: La planta cerrará el año 2024 con un drástico descenso de la producción del 45%, reflejo de operar con un solo modelo, el Kuga (tras la pérdida de sucesivos modelos). La producción total de vehículos prevista para este año rondará las 127.000 unidades, lejos de los más de 300.000 de hace unos años.
- Incertidumbre laboral: La factoría mantiene un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) de tipo RED en vigor, con paros intermitentes que se han encadenado desde la pandemia y se prevé que se extiendan al menos durante los próximos dos años para la plantilla actual de unos 4.300 empleados.
- Luz al final del túnel: La viabilidad futura se sostiene en el compromiso de la multinacional de fabricar en Almussafes un nuevo vehículo multienergía a partir de 2027, aunque la inversión y el volumen de producción asociados aún no han sido revelados por completo. Mientras tanto, el bajón en Ford ya ha impactado en la reducción de plantilla de proveedores como Yanfeng en Valencia.
3. El vector Oeste
El tercer vértice de este nuevo mapa industrial se sitúa al oeste del área metropolitana, en la zona de Cheste o Requena, junto a la A3, la autovía de Madrid, donde el interés chino por la instalación de una megafactoría de coches eléctricos ha tomado el relevo de la frustrada expectativa de Tesla.
- Multinacionales chinas en el radar: En el contexto del interés de China por asentar producción de vehículos eléctricos en España, delegaciones de empresas como BYD (líder mundial en enchufables) han visitado València en búsqueda de suelo industrial.
- Ubicaciones estratégicas: La comarca de Cheste, con grandes polígonos como «La Ceja», junto a Requena y Sagunto, figuran en el radar de estas multinacionales chinas, que ven en València un punto estratégico por su puerto, su infraestructura industrial y su talento.
- Impacto de la decisión: Si un gigante como BYD o un competidor chino eligiera el Polígono de Cheste, se completaría un triángulo de la automoción de alto valor: Sagunto (Norte) con las baterías, Ford Almussafes (Sur) con el ensamblaje en transición y Cheste (Oeste) con un nuevo fabricante de coches eléctricos. Este «Eje del Bypass» consolidaría el tejido industrial alrededor de la principal vía de comunicación del área metropolitana de València, asegurando una diversificación y un futuro industrial ligado ineludiblemente al vehículo eléctrico.
Otro gigante chino
Y para completar el eje, esta semana hemos conocido que el gigante automovilístico chino SAIC Motor, propietario de la marca MG, está evaluando la Comunitat Valenciana como la ubicación preferente para su primera gran factoría de coches en Europa, según han confirmado fuentes a Levante-EMV. Una delegación de la multinacional asiática se ha desplazado en varias ocasiones a la región, examinando suelos industriales con la necesidad de asegurar una parcela de aproximadamente medio millón de metros cuadrados. Los técnicos de MG han centrado su interés en dos localizaciones clave: Sagunt y Cheste.
Sagunt se perfila como un enclave estratégico por dos razones fundamentales: su conexión directa con el Puerto de València y la proximidad a la Gigafactoría de baterías de PowerCo (Grupo Volkswagen). Esta última conexión es relevante dado que Volkswagen y SAIC mantienen una joint venture de cuarenta años para producir vehículos en China. Por el contrario, Cheste, que fue inicialmente la opción favorita de Tesla, también ha sido visitada, aunque los responsables de MG se decantaron por Sagunt como la ubicación más ventajosa.
La multinacional aún no ha tomado una decisión final, sino que se encuentra en fase de valoración. No obstante, València cumple con todos los requisitos esenciales de la compañía: conexión logística marítima, mano de obra cualificada y una robusta red de proveedores de automoción. Los representantes de SAIC visitaron la región «en varias ocasiones» entre julio y septiembre de 2024, y ya tienen claro su potencial para albergar la producción europea de la marca.



